Capítulo 20

Mientras tanto…

Mientras nuestros amigos Felurian, Jack y Ascua se adentran en lo que podría ser la jungla que esconde la Fuente del Renacer, y posiblemente la única esperanza de Jack para poder ganar a Belgarath en la batalla final, Lyaan se encuentra peleando contra su hijo Gul'Dan.

-"Padre, no eres el mago que una vez fuiste, eres viejo y débil ahora. Deja de luchar, es inútil". Dijo Gul'Dan.

-"Soy viejo y débil, pero aún puedo plantarte cara" Respondió Lyaan.

En ese momento Lyaan conjuró una ilusión, tratando así de engañar a Gul'Dan.

La figura de una mujer apareció antes Gul'Dan.

-"Supongo que este es uno de tus burdos trucos. No funcionará conmigo, puedo ver más allá de tus ilusiones baratas". Comentó Gul'Dan con desprecio.

-"Hijo...¿Qué te ha pasado en la cara? ¿Por qué estás peleando contra tu padre?" Dijo una la mujer que apareció ante Gul'Dan.

-"Tú no eres mi madre. Mi madre murió hace años por la fiebre" Respondió Gul'Dan.

-"Gul'Dan... estaba tan orgullosa de ti, ibas a ser un gran mago y ayudar a este mundo a ser un lugar mejor. En lugar de eso, mírate. Peleando contra tu padre, tratando de ayudar a Belgarath a acabar con el mundo tal y como lo conocemos..."

-"¡Nada de lo que digas importa! Soy un gran mago y soy yo el que va a darle a Belgarath la oportunidad de volver. ¡Soy el mejor mago que existe!" Gritó Gul'Dan.

-"No hijo. Solo eres una marioneta de ese dichoso mago. Solo vives porque él lo desea y porque te necesita como una herramienta. En cuanto vuelva a la vida, te despojará de todo tu poder, sabes perfectamente que Belgarath no quiere que haya nadie que pueda hacerle sombra" Dijo su madre con un tono firme.

-"¡¿Y eso qué mas da?! Soy yo, Gul'Dan el gran poderoso el que resucitará a Belgarath. La historia me recordará como un gran mago.

-"No hijo, la historia te recordará como un monstruo que sacrificó a sus iguales por poder..."

Según la madre de Gul'Dan decía eso, la figura de Lyaan apareció detrás de ella. Gul'Dan notó como algo frío entraba en su estómago.

En ese momento comprendió lo que sucedía. Lyaan le había distraído con una ilusión de su madre, para poder acercarse poco a poco a él, y así clavar una daga en su estómago.

-"Padre... he he he al final sí que tenías un as en la manga. Ha sido un buen truco." Decía Gul'Dan entre toses mientras caía al suelo.

-"Nunca deseé esto hijo. No me has dado otra opción, no puedo permitir que cumplas tu misión. Sin embargo, siento mucho que todo esto haya terminado así. Ningún padre debería verse obligado a hacer esto." Dijo Lyaan arrodillándose antes su hijo moribundo.

-"Sabes, al final sí que soy tu hijo, he he he" Continuó Gul'Dan entre más toses.

-"¿A qué te refieres?" Preguntó Lyaan.

-"Yo también tengo un as en la manga he he he. Belgarath ya está despertando, no hay nada que ese chico pueda hacer para evitarlo y tú tampoco. Yo moriré pero Belgarath vivirá." Respondió Gul'Dan.

-"¡No! ¿Cómo es posible?" Quería saber Lyaan.

-"Dejé todo listo antes de venir en tú búsqueda. No puedes hacer nada ya. Hay una ultima cosa que me gustaría decirte." Dijo Gul'Dan ya tumbado en el suelo.

Lyaan se acercó para escuchar las últimas palabras de su hijo.

-"Tú vendrás conmigo." Susurró Gul'Dan al oído de su padre, mientras le hundía un pequeño cuchillo en la espalda.

-"¡Argh! ¿Qué hice mal como padre, para que odies tanto este mundo?" Preguntó Lyaan con su último aliento.

-"Nada padre, solo ansío poder, por encima de cualquier cosa..." Fueron la últimas palabras de Gul'Dan.

*De vuelta en la jungla con Felurian, Ascua y Jack*

-"De acuerdo a la comida que hemos consumido y las veces que hemos dormido, creo que debemos llevar dos días de camino." Dijo Jack.

-"Es horrible viajar en estas condiciones..." Respondió Felurian.

Los tres amigos llevan ya unos dos días de camino por la jungla que se escondía tras los pilares que cruzaron. No ha habido ningún incidente, pero es imposible ver a través de la densa vegetación. De igual si es de día o de noche, la luz no atraviesa las densas copas de los árboles que cubren la jungla. Todo queda rodeado de un tenue color morado por los dichosos árboles.

-"¿No recuerdas nada más que pueda ayudarnos en este laberinto?" Preguntó Felurian mientras caminaban.

-"Llevo pensando en eso desde que llegamos. Entre Ascua y yo estamos repasando todas las historias y leyendas que Lyaan me hizo leer, para ver si encontramos algo más de información. Por ahora, nada..." Jack con tono de preocupación.

-"Por ahora estamos bien, y esta jungla no parece tener demasiados peligros y habéis podido cazar y comer sin problemas." Dijo Ascua.

-"Eso es lo que me preocupa. No me fío de este sitio. Todo parece muy calmado pero según la leyenda que leí, aquí solo suceden tragedias. Cinco hombres, solo Volgar llegó con vida." Continuó Jack.

-"Creo que estás dándole demasiadas vueltas, quizá descansar te venga bien." Ofreció Felurian.

-"Sí, seguramente algo de comer y un poco de descanso me ayudará a verlo todo desde otra perspectiva." Accedió Jack.

Establecieron un pequeño campamento, Ascua encendió un fuego y rápidamente se pusieron a comer Felurian y Jack.

-"¿Por qué estás tan preocupado Jack?" Preguntó Felurian.

-"Me da vergüenza decírtelo..."

-"No seas tonto, hemos pasado ya muchas cosas juntos. Puedes decírmelo."

-"De los cuatro hombres que entraron aquí con mi bisabuelo Volgar, dos desaparecieron y los otros dos se mataron porque se volvieron locos. No quiero volverme loco y hacerte daño Felurian." Confesó Jack.

-"Eso no va a pasar Jack, eres fuerte y este sitio no te va a volver loco." Dijo Felurian acercándose a Jack.

-"Ya bueno pero podría pasar, no lo sabes. No podría perdonarme si algo te pasase y menos aún si fuese por mi culpa."

-"Confío en ti Jack, sé que nunca me harías daño."

Tras esa pequeña conversación, Felurian se levantó para ir hacia su saco de dormir.

-"Durmamos un poco, ya verás como mañana encontramos algo." Dijo Felurian.

Jack quedó mudo sin saber qué más decir.

*Dos días más tarde*

Los tres amigos continuaron caminando al rededor de lo que parecía un gran muro de piedra. Parecía más la falda de una montaña, el final de la misma. Sin embargo, debido a la espesura de aquella jungla, era imposible ver más allá. Nuestros amigos solo sabían que debían estar rodeando una gran montaña.

Jack y Ascua habían seguido recordando pequeños poemas, cuentos y leyendas que leyeron con Lyaan.

Solo una de ellas parecía poder tener algún tipo de conexión con aquel sitio. Sin embargo, era extraño ya que es algo que solo Jack recuerda. A pesar de la conexión mental entre ambos. Ascua no tiene acceso a los recuerdos de Jack antes de que se conociesen.

Lo que Jack recordó es un pequeña canción que recuerda de su infancia. Brom se la cantaba por las noches para dormir y cuando Jack le preguntaba el origen de aquella canción: la respuesta siempre era la misma: "tu madre la cantaba mucho mejor que yo".

-"Hay una canción que Brom me cantaba de niño, quizá tenga algo que ver con este sitio."

-"¿Qué dice la canción?" Preguntó Felurian emocionada por algún tipo de novedad.

-"La canción habla sobre un niño que está perdido. Está perdido en un mar con un agua de un color extraño, es morada." Comenzó Jack.

-"Claro, el morado de los árboles...." Felurian.

-"La canción explica que el niño consigue llegar a su objetivo, pero tiene que dar algo a cambio, para conseguir lo que tanto anhela. Durante su periplo por ese mar de color morado, el niño encuentra diferentes peligros. Todos ellos los supera con éxito, hasta llegar al final. En ese momento Brom siempre se detenía, me decía que lo que sucedía después lo dejaba a mi imaginación." Dijo Jack.

-"Entiendo. Piensas que debemos aún encontrarnos con algunas dificultades, y si las superamos llegaremos a nuestros destino, donde deberemos entregar algo a cambio, ¿verdad?" Dijo Felurian.

-"Sí, eso pensamos" Dijeron Jack y Ascua al unísono.

Tarea:

¿Crees que el niño de la canción consigue su objetivo? ¿Qué crees que el niño de la canción dio para conseguir su objetivo?